EPIGRAMA DEL DÍA

"La suerte es una fuerza compensatoria para beneficiar a los más torpes". (Prontuario de supervivencia, Pepe Gómiz)

EPIGRAMAS ANTERIORES

FICHA TÉCNICA

Descripción: Este blog es una nanoporción de mí mismo; a mi vez, nanoporción de la humanidad; a nuestra vez, nanoporción del universo; a su vez, nanoporción de un todo perteneciente al supratodo que ni llego a imaginarme.

Herramientas: Los fenómenos de mi experiencia, los noúmenos de mi fantasía, mi literatura, mi música y demás utillaje.

Valoración: De visita muy recomendable.

Expectativas: Tras consultar el DRAE, diré que vergatarias, padrísimas, óptimas.

Conclusión: Sin necesidad de consultar el DRAE, acción y efecto de concluir.

viernes, 4 de marzo de 2011

ENTREVISTA A MI PROPIA MUERTE


ENTREVISTA A MI PROPIA MUERTE

—No me atrevo a decir ‘Bienvenida’.

—Lo entiendo.

—En fin. Como se trata de una visita no oficial, fuera de calendario y con el único propósito de contestar a mis preguntas, lo diré: Bienvenida.

—Muy amable.

—¿Sabe?, pensé que me sentiría peor teniéndola cara a cara.

—¿Cómo de peor?

—Quizás…

—¿Muerto?

—Sí, claro. Muerto. Pero no. Me refiero a esos instantes previos a la muerte. Siempre he creído que me darían mucho miedo.

—Ten en cuenta que mi presencia hoy aquí es amistosa.

—Ya, ya. Que, cuando venga en serio, la cosa puede cambiar. ¿Verdad?

—Verdad.

—Pues empecemos, si le parece.

—Adelante.

—¿Es usted mi propia muerte, o la propia muerte de todo el mundo?

—La tuya exclusivamente.

—¿Significa eso que cada quien tiene la suya propia?

—Así es.

—Y, dígame, ¿qué hace usted mientras estoy vivo?

—Esperar.

—¿Dónde?

—En el futuro.

—¿En un lugar concreto del futuro?

—¿En un momento concreto, quieres decir?

—Sí.

—No. Las muertes no están prefijadas.

—¿Cómo sabe, entonces, cuándo tiene que llegar?

—Me avisan.

—¿Quién?

—Dios.

—¿Él personalmente?

—Dios no es una persona.

—Vale. En calidad de Dios, pero le avisa Él.

—Repito que me avisan. Dios tiene muchos colaboradores.

—De acuerdo. Le avisan. ¿Significa eso que usted no está siguiendo mi vida?

—Por supuesto que no. Yo soy un hecho del futuro que espera su hora para acontecer. Nada más. No nos permiten involucrarnos en la vida de quien nos encomiendan.

—Pero conmigo se está involucrando.

—Es una excepción reservada para gente como tú, que se interesa con seriedad por la muerte.

—¿Quiere decir que le han dado permiso para concederme esta entrevista?

—En efecto. De otro modo habría sido imposible.

—Y, dígame, cuando un día le ‘avisen’, ¿será usted quien determine la forma en que he de morir?

—Absolutamente no. La forma y el tiempo de tu muerte lo determinaréis tú, con la aprobación de Dios, o solo Dios. Y yo, entonces, ejecutaré la orden. Pero sin tomar decisión alguna.

—A ver si lo he entendido. Si Dios decide que yo muera, le avisa y usted viene. Y si me suicido, también le avisa y usted viene. ¿Correcto?

—Correcto.

—Bien, bien. Habría mucho más que preguntarle: si es mi propia muerte en todas mis reencarnaciones, qué le sucederá cuando yo haya muerto o cómo actúa durante un coma, por ejemplo, pero lo dejaremos para mejor ocasión.

—Como quieras.

—Una última duda: ¿Haberme conocido anticipadamente, hará que le tiemble el pulso cuando regrese a por mí?

—También yo tengo una última duda: ¿Haberme conocido anticipadamente, hará que no te tiemble el pulso cuando regrese a por ti?

—Gracias. Todo un placer.

—No hay de qué. El placer ha sido mío.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

CONTACTO

  • pepegomiz@msn.com

DATOS PERSONALES

SEGUIDORES (pulsa F5 si no aparecen)