(Publicado en mi blog antiguo el sábado 25 de julio de 2009)
En ocasiones se le queda a uno la mente en blanco y actúa como de forma involuntaria. Al recobrar la conciencia, puede pasar que incluso avergüence lo que estábamos haciendo. Así, esta tarde, me veo de pronto con un matamoscas en la mano, marcando en el aire un compás de 4/4, mientras sonaba mi "Carta a Bach N. 13". ¿A ver si va a tener razón tu madre, y estás para que te encierren? me han sugerido los fantasmas. Pero no. Qué va. Ni mucho menos, fantasmas enredadores. Lo que sucede es que el "Samar", uno de los yates más lujosos del mundo, se me ha plantado justo delante de mi ventana. Tiene 78 metros de eslora. Casi 13 de manga. Helipuerto. Costó 70 millones de euros. Vale alquilarlo una semana más de 100 millones de pesetas. Su propietario tiene una fortuna de 14.000 millones de dólares. Los salarios anuales de los 26 empleados de su tripulación van desde los 30.000 euros de una camarera hasta los 150.000 del capitán. Y yo fumo tabaco de picadura porque no me da para comprarlo liado. Hay que joderse. Es lógico, pues, que mi cerebro desconectara. Era eso, o morir de la envidia. Era eso, o suicidarme de una puta vez. Dios y yo vamos a tener una palabritas muy serias, pero que muy serias, cuando me lo cruce. En la foto de arriba, tenéis el cuadro que me he encontrado al asomarme. En la de abajo, le he dado un zum para que veáis que no os engaño: Es el "Samar"en el puerto de Almería. Y yo fumando picadura...
En ocasiones se le queda a uno la mente en blanco y actúa como de forma involuntaria. Al recobrar la conciencia, puede pasar que incluso avergüence lo que estábamos haciendo. Así, esta tarde, me veo de pronto con un matamoscas en la mano, marcando en el aire un compás de 4/4, mientras sonaba mi "Carta a Bach N. 13". ¿A ver si va a tener razón tu madre, y estás para que te encierren? me han sugerido los fantasmas. Pero no. Qué va. Ni mucho menos, fantasmas enredadores. Lo que sucede es que el "Samar", uno de los yates más lujosos del mundo, se me ha plantado justo delante de mi ventana. Tiene 78 metros de eslora. Casi 13 de manga. Helipuerto. Costó 70 millones de euros. Vale alquilarlo una semana más de 100 millones de pesetas. Su propietario tiene una fortuna de 14.000 millones de dólares. Los salarios anuales de los 26 empleados de su tripulación van desde los 30.000 euros de una camarera hasta los 150.000 del capitán. Y yo fumo tabaco de picadura porque no me da para comprarlo liado. Hay que joderse. Es lógico, pues, que mi cerebro desconectara. Era eso, o morir de la envidia. Era eso, o suicidarme de una puta vez. Dios y yo vamos a tener una palabritas muy serias, pero que muy serias, cuando me lo cruce. En la foto de arriba, tenéis el cuadro que me he encontrado al asomarme. En la de abajo, le he dado un zum para que veáis que no os engaño: Es el "Samar"en el puerto de Almería. Y yo fumando picadura...
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